2020

Querdio 2020,

Fuiste un año atípico y, para muchos, desastroso. Para otro, solo diferente. Yo les agradezo a ti y al Universo porque tengo la fortuna de ser de los segundos. Estuviste lleno de muchos cambios que al final desencadenaron cosas muy positivas.

No voy a convertir esto en una larga lista de todo lo que me dejaste, pero sí quiero resaltar dos o tres cosas, así que empecemos.

Gracias por dejarme a toda mi familia y amigos. Pudo haber sido el virus, pudo haber sido la vejez, pudo haber sido cualquier cosa, pero afortunadamente no lo fue. Seguimos todos aquí disfrutando de la vida y de la compañía de los unos y de los otros.

Aunque sé que nuestra forma de ver la muerte es algo irracional, porque de que asacaba, se acaba, sé que no esto preparado para verla de otra forma y de que en el momento que alguien me falte, voy a sufrir. Este año no tuve que hacerlo, así que ¡gracias!

Gracias por un nuevo trabajo. Definitivamente tú y el universo tenían sus planes. La forma en que conseguí mi nuevo trabajo fue la forma más inesperada. No estaba buscando y dije que no desde el comienzo. Pero como lo que tiene que pasar tiene que pasar, ahora hago parte de una nueva familia y estoy feliz y agradecido de estar ahí

Gracias por enseñarle a mi mamá cómo disfrutar el descanso y por mi nuevo apartamento. Aunque suenen muy diferentes, tú y yo sabemos que van de la mano. La fractura de mi mamá, que terminó coincidiendo con la cuarentena, que hizo que ella no trabajara más, que la hizo decidir vender el apartamento donde vivíamos, significó un cambio gigante y muy positivo para mí. Este año lo termino en un nuevo apartamento después de 10 años y viviendo con mi hermana, una de las personas que más alegran mi vida. Nuestro comedor es una Rimax blanca y nuestra sala son dos colchonetas de Marco, pero no puedo estar más agradecid por ese nuevo espacio lleno de buena energía.

Finalmente gracias por haberme dejado disfrutar de las personas que más quiero. Por darme la oportunidad de pararme en mis piernas para ir a verlos; por mis brazos para poder abrazarlos cuando los veo; por mis dedos y mi celular para mandarles mensajes y llamarlos; por sus vidas; por hacer parte de las de ellos.

2020, cambiaste la dinámica diaria de todos, hiciste de las tuyas y algunos están en todo su derecho de llamarte ingrato, malo o algo mucho peor. Pero yo personalmente no puedo hacer eso. Yo solo puedo agradecerte y quererte por todo lo que me dejas. Me despido de ti con nostalgia, pero feliz de haberte conocido y de lo bien que me dejas para conocer al nuevo 2021.

De nuevo, a ti y al universo, GRACIAS INIFINITAS.

Con cariño y aprecio,

Camilo Luna